17 noviembre 2007

PasadoMañana

Subimos a la terraza
como pájaros de noche
con el canto obstinado, roto.
Armados de alas para siempre.
alas de madera pesada.
Llovía
y el día parecía ir de atrás para delante.
El agua hacía charcos en piletas vacías.
Nada de todo esto podía llamarse mañana.




1 comentario:

Anónimo dijo...

Es esto Abbey Road!!... y nadie puede pasarlo por alto

saludos gnomo!